11.25.2007

Cerrada por crímenes a la humanidad ("Lo maté por amor, me quería dejar por otro").

"The devil speaks truth
much oftener than he's deemed.
But he has an ignorant audience."

Lord Byron.

"Nunca entiendo el móvil del crimen,
a menos que sea pasional."

J. Sabina.

"¿Qué culpa tiene la estaca,
si el sapo salta y se ensarta?"

Chicoché.

Me ganaron el jalón. Ahi anda el Venadito como loca, despotricando con respecto a partir madres, a matar por celos y a morir por el primero que se deje, pero gata que maúlla no araña y nomás me quedo con mi desmadre inconcluso. Mientras tanto, con menos alharaca y más rating en los medios, ocurre un suceso que al parecer nomás me dejó consternada a mí. Podríamos argumentar que fue opacado por el escándalo de Fabiruchis y la prensa sensacionalista, pero de eso haré especificaciones más adelante. Como aaquí yo manejo fuentes fidedignas, principios de autoridad y trabajo haciendo periodismo serio; recurriré en este desglose a lo que siempre me ha funcionado: mi veldá. Y a quien no le guste, pues que no me lea.

La noticia que me tiene consternada es el hecho de que en Lost Mochis un chamaquito de 19 años, sonriente, guapetón, de bonita dentadura y simpatía arrolladora; sin más preámbulo se escabecha a balazos a su pareja, connotado funcionario académico de un alma máter que no es la mía (léase la UAS). Y digo sin más preámbulo porque el pinche Venadito escandaloso ahi anda cerveceando y gritándole al mundo que madreará, que golpeará, que capará; y toda una sarta de barbaridades que nomás promete y nunca cumple. Por el contrario, ni se anima y ahi anda lloriqueando por los rincones cuando no la ven o vuelta un moco al minuto 15.34 de un filme romanticón. Y por más que siga despepitando contra el género humano, masculino o lo que sea, ándale que se la madrugaron.

Pues nuestro personajazo, flamante asesino pasional y paisano, defensor de la fidelidad, ícono de la lealtad de pareja, criminal confeso por gusto propio y demás epítomes que le quieran endilgar; le vuela la crisma a su querido-novio-señor, lo tira a un canal (pa' los que saben, el canalón que está por los Álamos enfrente de la Colonia Burócrata) y se va a dormir a su casa. Aplausos y fanfarrias, por favor.

Tres días más tarde, aparece el flotante cadáver del funcionario, y el chamaquito sin ningún empacho va y se entrega a las autoridades correspondientes. De forma paralela, el mismo día ahi andaba el Venadito en Lost Mochis pasando el puente del día de Muertos; con cinco cervezas en la panza cantando a voz en cuello: '...te voy a chupar todo el protoplasma, todo el protoplasma, todo el protoplasma, te voy a chupar... y a ver qué haces sin protoplasma, joder...¿qué vas a hacer, sin ojos sin lengua, sin pelos, sin alma, y aparte sin mí? ¡Cabrón!...' 1 Pero ya ven cómo es, la neta no hace nada.

Posiblemente me caigan oleadas de comentarios recriminándome por apoyar un asesinato, mi querido tío el monseñor que ofició la misa del asesinado me excomulgará, la coordinación de la UAS borrará mi expediente (bendito Dios!), el mundo farandulero me dará opiniones sobre la madriza fabiruchesca, mis detractores me querrán madrear a mí, y los fans del Mochaorejas me pedirán que escriba su biografía. Pero como nadie me lee y me encanta dar explicaciones no pedidas, ahí les va. A quien le quede el saco, pues que le haga dos hoyitos.

-Respuesta a los de Provida, monjes budistas, sociedad protectora de funcionarios públicos y cualquier otro que se me escandalice: Yo no apoyo asesinatos, o por lo menos no del todo, y mi postura ética ante el crimen no la voy a discutir aquí. Lo que le aplaudo a este asesino no es el crímen en sí, sino el haberlo hecho sin escándalo y responsabilizarse de lo que hizo al entregarse. Y por si fuera poco, todavía sonreír y saludar a las cámaras. Si mucha raza tuviera ese coraje, a los de Provida les faltaría con quién engrosar sus filas, los funcionarios públicos no me la harían de jamón con mis trámites de titulación, los escandalizados se dejarían de mojigaterías y los monjes budistas, pues seguirían siendo monjes budistas.

-Respuesta a mi tío el monseñor y su latente excomunión hacia mi persona: Ya se había tardado. Pero le aclaro que tengo temor de Dios: mis orgasmos duran lo que duran tres credos y ostento un escapulario de San Malverde en mi muñeca derecha.

-Respuesta a los que viven en carne propia el dolor de Fabiruchis: Pa' empezar, los móviles del crimen hacia Fabián Lavalle y el de este asesino dolido y solitario carecen de relación. Díganle de mi parte al aludido conductor de televisión que los besos se pagan al contado, para que no falten y para que no se lo madreen a uno sin que lo pida.

-Respuesta a la coordinación de la UAS: Ustedes nunca me han visto (ahora el Venadito desaparece tras una estela de humo).

- Respuesta a mis detractores: ¿Ustedes qué hacen aquí? Váyanse al blog de mi hermano.

-Respuesta a los fans del Mochaorejas: ¿Cuándo empiezo?

Ahora mi fanaticada se preguntará, presa de la consternación: '¿Qué va a hacer ahora el Venadito, si su faceta rompemadres resultó ser un fiasco?' Pues nada. La que suscribe está ahorita tranquilita, frente a una lata de pulque 'La lucha' (older than tequila, stronger than beer) -gracias, Isra-, olvidando el asesinato como una de las bellas artes y contemplando otras formas de artisteada. Buscaré otra tumba pa' mi rumba, seguiré salseando en el bar Dos Naciones, figuraré del brazo de altos personajes del espectáculo, tiraré el machete por la ventana y me pondré a hacer cualquier cosa que me haga sentir un poco más Carmen Salinas y un poco menos el Venadito como criminal.

1 Orozco, Regina. Protoplasma.

*
Ahi con la pena, les debo la imagen de la noticia.